El caballo de rutas, marchas y viajes
INDICE
- Introducción
- La edad del caballo
- La morfología del caballo
- La mente del caballo
- El carácter del caballo
- El sexo
- La compra del caballo
- Documentación y Seguro
Introducción
Lo primero que hay que decir es que todos los caballos valen para andar por un camino, pero no todos los caballos son buenos caballos para hacer turismo ecuestre.
No existe tampoco una raza especial, o mejor, para hacer rutas, marchas y viajes a caballo, pero hay algunas que son más adecuadas que otras para esta actividad.
También hay que considerar la experiencia y el nivel de equitación del jinete; Un caballo de carácter fuerte o nervioso, y por tanto, poco adecuado para rutas y marchas puede, también, servir si lo monta un jinete experto, de mano fina, que lo sepa llevar sin problemas.
Lo mismo pasa con un caballo cuya morfología no sea la ideal para el turismo ecuestre, si conocemos bien sus virtudes, defectos y limites podremos utilizarlo para rutas y marchas, aunque no sea el caballo mas adecuado, siempre que el esfuerzo a realizar (distancia diaria y peso de la carga) lo adaptemos a sus capacidades.
El caballo ideal, sin embargo, es aquel que se adapta bien a las marchas y viajes y puede ser montado fácilmente por cualquier jinete con un nivel de equitación normal.
Estas son las características que definen el caballo ideal:
La edad del caballo
Para rutas y viajes valen todos los caballos sanos que estén entre seis y veinte años.
Pero mi consejo es que utilizéis caballos de más de siete años, por debajo de esta edad un caballo está recién terminado su crecimiento, su mente todavía es poco madura y posiblemente su doma tampoco sea perfecta.
Un caballo de cinco o seis años, en rutas de uno a tres días, puede ser muy divertido y un buen jinete lo pasara muy bien con el, pero en un viaje de semanas, lo más fácil es que el caballo cause problemas (estrés, insociabilidad, miedo, etc.) , salvo excepciones, que las hay.
Lo mejor para el turismo ecuestre es comprar un caballo montado, de entre siete y diez años, y al que le quedan, aun, bastantes años de vida útil.
Debemos tener en cuenta, además, cuando hablamos de vida útil, que a los veinte años, un caballo, puede estar perfectamente en activo si lo hemos cuidado, lo mantenemos en forma y no le pedimos lo que ya no puede dar
La morfología del caballo
La morfología del caballo es importante, tanto para la comodidad y seguridad del jinete como del propio caballo. Así, el tamaño más adecuado para el el turismo ecuestre, ronda 1,60 m.
Esta altura es adecuada para la mayoría de los jinetes y tiene tres ventajas, fácil de aparejar, no cansarse mucho al subir y bajar de la silla (movimientos que hay que hacer a menudo en un día de caminata) y la de poder sortear con facilidad las ramas del recorrido evitando tener que acostarse sobre el caballo para no accidentarse
Para rutas, elegir un caballo de lomo ancho, fuerte, corto y con el cuello bien sujeto. A diferencia de un caballo de carreras, que debe ser delgado para ir rápido, un caballo de marcha debe ser de buen porte, resistente y capaz de llevar al jinete y al equipo durante varias horas.
El caballo, además, debe tener extremidades fuertes, buenos aplomos, buenas manos, buenos pies y cascos sólidos.
Debe tener, también, un caminar cómodo para el jinete
También, a la hora de elegir un caballo, para rutas y marchas, hay que considerar el peso y la talla del jinete.
Si el jinete es alto (más de 185 cm) el caballo debe ser alto (165 cm o más) para que el conjunto de caballo y jinete este bien equilibrado. No estaría adecuado un caballo de 150 cm para un jinete de 190 cm. Aparte de la cuestión estética el problema es que el jinete tendría que montar forzando la posición para aplicar las ayudas, comprometiendo su equilibrio y el del caballo y posiblemente sobrecargando al caballo pues un jinete grande no suele tener un peso pequeño.
Si el jinete pesa por encima de la media (mas de 80 kg.) el caballo también debe ser un caballo con una morfología adecuada para soportar ese peso
Empíricamente se considera que un caballo debe pesar seis veces más que su jinete para que pueda llevar sin problemas al jinete, junto con los arneses, montura e impedimenta. Es decir, si el jinete pesa 90 kg. el caballo, en buena forma y sin estar gordo, debería pesar, 540 kg.
Para más información podéis ver el post "Cuanto peso puede llevar un caballo"
La mente del caballo
¡No es sólo el físico lo que cuenta!, es como en las personas, un caballo puede estar cortado para caballo de rutas y marchas pero si tiene una mente débil, no llegarás muy lejos con él.
Si bien, el turismo ecuestre, no es una equitación competitiva, sí requiere que el caballo tenga una mente estable y segura para que no se estrese fácilmente y se convierta en una pesadilla durante los viajes.
Características que confirman un buen estado de ánimo:
• Un caballo franco y estable, emocionalmente
• Seguro y sin miedo
• Sereno
• Dinámico y activo para no tener que estimularle para caminar, pero, al mismo tiempo, tranquilo y receptivo, a las solicitudes del jinete.
• Sociable con las personas y otros caballos. Puede ir en el grupo tanto a la cabeza, como en el medio o en la trasera, sin problemas
Todas estas cualidades permitirán al jinete partir tranquilo, sin temor a que elementos o acontecimientos externos perturben su caminar.
La cuestión de la sociabilidad con otros caballos, es fundamental si se viaja en grupo o si hay encuentros con otros jinetes.
El carácter del caballo
El caballo de rutas y marchas, ideal, debe ser, además:
• Respetuoso montado, pero sobre todo a pie. (que no empuje ni muerda y acompañe al jinete tranquilo, del ramal y a su paso)
• Capaz de ir solo a la cabeza
• Paciente para permanecer varias horas esperando durante las paradas
• Con más de 7 años para que su crecimiento esté finalizado y su carácter sea más maduro. Lo que permite pedir más esfuerzo sin consecuencias sobre su desarrollo físico o mental.
• Debe ser un caballo rústico, con buena adaptabilidad al clima y a la duración de la marcha.
• También debe ser un caballo que coma bien, se contente con poco y pueda enriquecer su alimentación, aprovechando lo que encuentra en el recorrido.
• Un caballo manejable y fácil de detener. .
• Con un pie seguro y que no sea torpe: al caminar por caminos en mal estado.
• Que no se asuste en los encuentros cotidianos con coches, motos, perros, etc.
• Y con la doma adecuada para viajar con el (ver el apartado de “Doma básica del caballo de viaje”
El sexo.
El sexo influye directamente en el comportamiento de su caballo de la siguiente manera
• El macho castrado: Tiene un: humor estable y pocos inconvenientes
• Las yeguas, durante el celo pueden ser un poco más caprichosas y menos sociables. Será necesario, especialmente durante este período, prestar atención si se cruza con machos enteros.
• Macho entero (sin castrar) : no se puede recomendar para rutas y marchas. Tiene serias desventajas en cuanto a su sociabilidad durante los paseos o encuentros con otros caballos. Puede ser incluso peligroso para otros caballos o jinetes. En el turismo ecuestre, normalmente, no se aceptan para viajar en grupo.
La compra del caballo
Para comprar un caballo hay cientos por no decir miles de consejos y opiniones provenientes de todo aquel que ha visto una vez un caballo. Hay tantas y tan contradictorias, algunas, que lo mejor es olvidarse de ellas y utilizar un método que, aunque, como todo en la vida no es perfecto, tiene, en mi opinión, más posibilidades de acertar en la compra del caballo adecuado para nosotros.
1) Buscar el caballo con la ayuda de alguien que sepa, de verdad sobre caballos, algo más que nosotros y que no tenga intereses en la compra.
2) Una vez encontrados uno o varios caballos, a la venta, cuyas características, a priori, puedan encajar con lo que buscamos, ir a verlos acompañado por nuestro asesor.
3) Mientras él se ocupa de la inspección “técnica” nosotros debemos observar bien, al caballo, para sentir que sensaciones nos da. Es importante que nos guste su aspecto, sus movimientos, su aparente carácter.
4) También es importante preguntar, que actividad ha tenido el caballo y quien ha sido su jinete. Podemos considerar que, si el caballo ha sido montado bor un buen jinete, el caballo estará mas puesto y mejor domado que si lo ha montado un jinete novato o torpe. En este ultimo caso es muy posible que el caballo adolezca de vicios o incluso este estropeado por resabios muy dificiles de quitar.
Por otra parte, si el caballo, tiene una doma completa o ha sido, incluso, preparado para competir en disciplinas como doma clasica o vaquera,el caballo estará mucho mas afinado en su doma, lo cual no quiere decir que sea el ideal para rutas, pero si somos buenos jinetes, capaces de aprovechar todo lo que sabe hacer, disfrutaremos mucho montandolo.
Lo ideal para rutas y viajes es, simplemente, un buen caballo, sano, sin defectos aparentes, que haya sido bien montado y este de hacer rutas y viajes habitualmente.
5) Si después, de la revisión, el asesor da el visto bueno, y nos gusta el caballo, tenemos que montarlo para ver cómo se porta. No hace falta pedirle muchas cosas, pero, eso sí, debemos ver su actitud, sus movimientos, su impulsión, su docilidad, su manejabilidad y su comodidad.
6) Si después de montarlo el caballo nos sigue gustando y deseamos comprarlo, entonces, es el momento de llamar al veterinario para que lo revise y le haga, al menos, un análisis de sangre.
7) Y si todo sale bien y el veterinario nos da el OK. Podemos comprar el caballo.
8) El precio, como es lógico, ya es cosa nuestra y del vendedor
9) Y, una vez comprado el caballo, que haya suerte.
Documentación y Seguros
Para formalizar la compra hay dos documentos que son imprescindibles
- Documento de indentificacion del caballo
- Para los caballos de raza pura, el documento de identificación es la Carta,
- Para el resto de caballos el documento es el DIE (Documento de Identificación Equina) o el pasaporte.
En todos los casos, en su documentación aparecerá la Universal Equine Life Number (UELN), un número de identificación único.
- Documento o contrato de compra-venta
Este documenmto es imprescindible para acreditar que eres el nuevo dueño del caballo
El tercer documento importante (no obligatorio) a gestionar, es una poliza de seguro de Responsabilidad Civil del caballo
Y por ultimo, si vas a trasladar el caballo a otra comunidad autonoma, debes sacar la llamada Guia de transporte.
Fdo. Juan Manuel Alvarez Diaz